En el fervor creativo de Gustavo Holstein, un alma apasionada, nace más que una marca de anteojos, nace un manifiesto visual, una convocatoria a soñar, a explorar horizontes desconocidos, a sentir la pulsión vibrante del universo y a sintonizar con las melodías del futuro.
Cada par de lentes es un testimonio de más de un cuarto de siglo de experiencia, un legado de innovación tejido en el corazón de Argentina y proyectado hacia los ojos del mundo.
Nuestros procesos creativos son la combinación justa entre el ingenio y la meticulosidad. Los nequipos de diseño de Estados Unidos y Argentina, en un esfuerzo conjunto, entrelazan culturas y perspectivas para plasmar necesidades universales en formas únicas.




